Vivienda unifamiliar en parcela de urbanización del Golf Empordà.
La vivienda se desarrolla en una única planta, situándose al fono de la parcela, dejando libre un amplio jardín orientado a sur donde también se ubica una piscina. El edificio se conforma como la macla de dos cuerpos diferenciados en altura y materiales. Un cuerpo más alto con paredes de hormigón, y otro más bajo con acabado exterior revocado donde se disponen los espacios privativos de sus cuatro dormitorios y baños.
El cuerpo de hormigón se avanza al salón con un plano inclinado que configura un porche enmarcado y protegido del viento que se enfrenta a la terraza de la piscina y al jardín. Los materiales que definen los interiores son pocos y luminosos: paredes pintadas en blanco, carpintería lacada en blanco y pavimento porcelánico gris claro.
Solo mediante pequeños cambios de altura de falsos techos y cortineros con luces indirectas se consigue generar riqueza espacial en el diseño de esta vivienda.